domingo, julio 27, 2014

Crónicas Italianas


Ella es hermosa y vive en Italia, con su esposo, ella no lo ama pero tienen un hijo de unos 3 o tal vez 4 años, y salió embarazada después de unos 6 años de relación con él…y ella es hermosa, pero no es feliz. Que fría es Italia, tan fría como un puerto con playa, donde usas bikini y pega el sol de frente, pero ella no lo ama y no es feliz, y está lejos de mi, en Italia.

Escribo esto en un cuaderno, si tuviese Internet cerca buscaría cuantos kilómetros hay desde Isola di Capo Rizzuto hasta Caracas. Y para ser un poco sincero con ustedes, yo mataría por comerme su tatuaje discreto, ese que tiene allí donde ella y yo sabemos. Siento envidia del agua en aquella playa de Italia que le murmura el cuerpo sin que ella se de cuenta, como si nada.

Quien no ama cuando puede, no amará cuando quiera, vaya mierda de vida y ella no lo ama y no es feliz, pero está en Italia y aunque hay sacrificios que se deben hacer por un hijo, siempre en cosas del amor es mejor pensar en uno mismo primero. Y nunca la hice mía por esperar el momento adecuando, ¿adecuado?.. ahora ella está en Italia..

Ella es sumamente bella y se va a ir a vivir a Italia, con su mari-novio, ella tal vez lo ama, tal vez no, tal vez es costumbre, es lo más seguro. Espero que sea feliz con él en Italia. Todavía recuerdo esos 3 o tal vez 4 años donde ella lo amaba y él se aprovechaba de ella teniendo novia y dándole un puesto segundón en su vida. Una mujer tan bella, cómo plato de segunda mesa.. enamorarse solo, le pasa a cualquiera.. hasta a las mujeres sumamente bellas. 

Ellos ahora tal vez se aman y pronto se van a vivir a Italia, ¿en serio ella creé que ahora si es prioridad?.. me cuesta mucho creer en cambios tan repentinos viniendo de un hombre y mucho más en amores tan rebuscados, ella es sumamente bella y yo mataría por tenerla, pero, no tengo nada que hacer en Italia.

Quien mendiga amor realmente no sabe lo que se siente ser amado, y evito no opinar de su vida, para no parecer celoso, aunque lo estoy, su boca.. sus ojos y sus senos… se irán lejos de mi a Italia. Lástima que el hombre que fue infiel una vez lo será siempre y ella en algún  momento será la engañada y no podrá reclamar nada, ya que en el pasado fue la otra y ambos estarán en Italia.

En lo personal, lo único que puedo contarles sobre Italia en mi vida, es una escala en un vuelo en Roma vía Madrid y que hace algunos años hice un curso de comida mediterránea y me ha servido para tener sexo…

después de algunas cenas..  


jueves, julio 17, 2014

02:37 AM

cargo con esta extraña inmovilidad
de saberme ajeno a tu domingo.
donde encender un cigarro y
mezclarnos entre el humo
asomados por la ventana del cafetín
donde soplan las palabras y no vuelven

porque quizás haya sido esa noche
maldita noche
la miseria de encontrarnos en el viento áspero
de una Caracas en habitación
y el aroma a tabaco
y el whisky que moja mis labios
y la quietud húmeda que se oculta entre tus piernas.

Ya no sucede lo de arremeter en ti
con mis manos silenciosas
y mi boca en tu espalda
ya no llega hasta ti
mi arcaica sonrisa
mi lenguaje paralelo
ni mi cabello hundido en tu pecho

ya no importa la noche
ni el ultimo cigarro
ni la hora del whisky
ni el segundo en que matar o morir
ya no importa..


viernes, julio 11, 2014

esta mañana


esta mañana
puedo sentir la comisura de tus labios
la delgadez de tu boca colándose entre la mía
las pecas de tu espalda

puedo sentir, también
el sol en la ventana
anunciándote
en la soledad que deja la noche

y tú ausencia, en la sabanas..en las almohadas,
tu perfume, en mi cama…

y por decir algo, puedo nombrarte esta mañana
ausente y serena, 
en el tibio viento de Agosto
ajeno y distante
un Agosto en donde 
los días
caerán (sin tregua)
bajo tu voz..

y sólo quedaran luego las silabas de tu nombre
desvaneciendo el aire..



shit happens


y te parecías a ella
pero no lo eras
a pesar de que traté de verte diferente
y me pasé de la raya
tu vestido en el piso
sólo estaba buscando lo que era mío
vi tus ojos y bese tus senos
 y la vi a ella mirándome
sólo trataba de encontrar a otra
como ella.

y me mudé lejos
pero quería verla aquí cerca conmigo
no me entiendo muy bien
ni siquiera lo intenté
 ni siquiera hablamos de eso
ni siquiera lo pensé con detenimiento
y duele cuando está lejos
la extraño
porque ella era mía
siempre yo era suyo 
y todo lo que había entre nosotros
era nuestro
cuando ella lloraba era yo su refugio 
la mantenía a salvo
de la oscuridad y otras cosas
y  me he mudado tan lejos de ella
y  quiero verla aquí conmigo
es que la extraño tanto…
….y no me entiendo muy bien

y te parecías tanto a ella
pero no lo eras
a pesar de que traté de verte diferente
y me pasé de la raya
tú de rodillas delante de mi
sólo estaba buscando lo que era mío
y te hale por el cabello y mordí tu espalda
 y la escuché a ella gimiendo
sólo trataba de encontrar a otra
como ella.




sábado, julio 05, 2014

porquería de sentimiento


Llamar al silencio fue lo único que pude hacer mientras ella sacaba sus suéteres de mi closet y no encontré palabra alguna para no perderla y fue permanente, nunca la volví a besar ni la volví a ver (por decisión de ella). Llamar al silencio cuando ella comenzó a recoger sus cosas y esperar por nuevas imágenes y nuevas fórmulas para enfrentar al día y su miseria (la que vendría después que se fuera). Y el intento... el intento de recuperarla en el que viví durante muchos años me mataba, pero lentamente, no de una vez por todas. Y eso siguió ocurriendo por algunos años, sólo que a veces uno necesita decir, hacer, vivir las cosas de alguna forma que no sea tan ruin, ni tan letal... y con el tiempo, lo dejé ser, lo dejé pasar, lo dejé sanar en cierta forma.. más que sanar me acostumbré a que ella nunca iba a volver.

Simplemente hacer algo con eso que no dice, que no hace, que no vive, y sin embargo, está ahí latiendo en el fondo de todo el invierno

¿Y qué se hace con tanto invierno? 

Si fuera tan simple anudarme la corbata y estrangular las soledades con el nudo, y abrigarme los pies con esos zapatos de hombre grande, como si eso protegiera la vida que grita a cada paso que doy, excluyéndome de todo temblor. Y terminé lleno de corbatas y ganas.. pero ganas de ella. Esas ganas de que su boca roce la mía, gritando toda la furia, todo el deseo, y todo el amor que me quedó a mi pero que ella olvidó a velocidad sónica. Ganas de que su invierno me abrace, que no sea sólo el fondo de un agosto que mate o que salve. Sentir más allá de la mañana, más allá de las manos, más allá del hastío, vaya mierda, y pasaron los días como pasa todo lo que no tiene mucha importancia y salí con tantas mujeres que no las puedo nombrar a todas porque sencillamente no fueron tan importantes como para recordarlas pero ella siempre estuvo presente en cada una de ellas.

Tanto fue que la busqué en otras mujeres y después de un tiempo la mezclé con todas y llegué a confundir lo que era de ella con lo que era realmente un gusto nuevo sobre alguna de esas mujeres que utilicé para olvidarla en el camino. A veces me pregunto si ella que estudió letras y que le gustan los blogs alguna vez habrá caído acá y se habrá dado cuenta que este niño que escribe no es otro que aquel que ella dejo asi, sin más.

Durante un tiempo me daba fuerzas diciéndome cosas del tipo: “Vamos hombre, seguro no eres el único al que ha dejado” o “Tranquilo, este año si te aceptará alguna salida a comer y se enamorarán de nuevo” pero no, jamás sucedió y eso que por unos 4 o 5 años la invitaba a salir cada 2 meses, y siempre me daba cualquier excusa y los “hoy no puedo” siempre estuvieron a la orden del día y pude haber ido a su casa o aparecerme en su trabajo pero no, yo quería que ella sencillamente saliera conmigo, me diera una oportunidad voluntaria y no por compromiso, pero no, eso nunca pasó.

Tengo 3 años que no sé nada de ella, “terminamos de hablar” por llamarlo de algún modo desde un día que me la encontré saliendo de un ascensor en el cubo negro, por Chuao. Ella trabajaba en un call center en aquel edificio y yo en una famosa petrolera que queda en el sitio. Aunque mis oficinas no quedaban en esa sede, iba unas 4 o 5 veces al año por temas de reuniones burocráticas. Al salir del ascensor ella me vió tan ejecutivo con mi séquito del trabajo y ella tan informal, tan de un trabajo que en costumbre es para jóvenes de 20 años y no para una mujer de 27 y aunque le advertí a mi Jefe y acompañantes que me dieran 5 minutos para saludarla, por dios, yo amé a esa mujer con locura, claro que me detuve a decirle lo hermosa que todavía era o tal vez lo hermosa que yo todavía la veía y ella todo el rato se sintió incomoda y me pidió que siguiera mi camino, que me estaban esperando.

Al día siguiente me escribió un correo, decía que por eso es que ella nunca había querido salir conmigo, que una mujer como ella no hacía nada con un hombre como yo y que yo había cambiado y eran tan diferente que sencillamente no teníamos nada más que buscar, que ella se “quedo en el aparato” y yo sencillamente, había “salido adelante” se puso bastante por el piso, como si tener un trabajo humilde o no haberse graduado eran los peores males del mundo y acto seguido me pidió que no la llamara más nunca a su casa (hoy todavía sigo recordando su número de teléfono, de hecho, hasta lo uso como clave de una de mis cuentas bancarias) que no la buscará más, que hiciera mi vida con una mujer “de mi mundo” y me borró de todos lados.

Ella siguió con su vida, como siguen las cosas que tienen que hacerlo y nunca sabré porque me dejó en realidad cuando éramos tan jóvenes y yo estaba tan enamorado de ella, tampoco sabré a que saben sus besos ya que de eso hace tantos años que ya lo olvidé. Nunca tuvimos esa “gran cita” que siempre esperé y por la cual me preparé tantos años, hasta recuerdo que hace unos 7 u 8 años me compré unos zapatos horribles porque leí en algún lugar que a ella le gustaban, entonces nunca los usé, los tenía en una caja esperando “salir con ella” para usarlos. Jamás pasó, nunca la pude volver a ver de nuevo hasta ese día del ascensor donde creo que se sintió humillada o poca cosa por alguna razón. 

Hoy por cosas de la vida, entré en su facebook y aunque no me tiene en sus amigos, pude ver algunas fotos porque tenemos un amigo en común, es novia de un tipo que se parece a uno de los gays de modern family, al pelirrojo, sigue sin casarse, sigue sin hijos, sigue estudiando y yo sigo pensando en ella de cuando en vez, no con tanta frecuencia como hace muchos años pero si de vez en cuando cómo debe ser. Aprendí a aceptar el hecho de que ella jamás volverá a ser mía y que jamás volveré a formar parte de su vida, y ya no me afecta que no esté o que tenga un novio chistoso, sólo es una porquería de sentimiento ese de la aceptación.

es una porquería de sentimiento.



jueves, julio 03, 2014

razones


Un día me dejó una mujer porque no podía ir a la playa todos los domingos con ella, es que tenía que trabajar y ella nunca lo entendió.

Otra me dejó luego por tardar mucho al eyacular, según ella “te tardas tanto porque no te gusta hacerlo conmigo”.

Una mujer un día me dejó porque no me gustaba amarrarla con mis corbatas y asfixiarla cada vez que teníamos sexo.

Recuerdo un día, una mujer me dejó porque era madre soltera y su hijo se encariñó mucho conmigo, según ella “no quiero que mi hijo se encariñé con ningún hombre”.

Un día me dejó una mujer por usar condón siempre que teníamos sexo, según ella “no es necesario, ya que uso pastillas, ¿sabes? yo me cuido”.

Otra me dejó luego por hacerle un poema “eso de la poesía es de maricas” 

Una mujer un día me dejó porque según ella  “no eres tú, soy yo”.

Recuerdo aquel día cuando ella me dejó, "es que me voy a casar con otro"

Un día me dejó una mujer por no querer casarme yo con ella, estaba loca, apenas iba en segundo año de la carrera y tenía 23 años.

Un día una mujer me dejó porque vivía en Caracas y ella en Valencia, vaya mierda de vida, eso dolió como si me quemaran la piel con hielo.

Otra me dejó por no querer depilarme el pecho “es que me gustan lampiños”.

Aquella mujer me dejó porque estando conmigo recordó que “extrañaba a su ex”… hasta bueno para ayudar a recordar cosas soy.

Recuerdo aquella mujer que me dejó porque yo sólo quería tener sexo con ella a cada rato, a cada hora.

Ella me dejó porque se iba a vivir a Chile, maldita..

Una mujer me dejó porque desde el primer momento supo que yo jamás iba a madurar..

La Abogada, si, la recuerdo, me dejó porque su divorcio estaba muy reciente y mis detalles bonitos y mi barba entre sus piernas no la ayudaban mucho.

Cómo olvidar a la chica que bailaba, me dejó por mi problema de no ir a una discoteca desde el miércoles hasta el sábado.

Otra mujer me dejó por tener un mejor trabajo que ella.

Pero luego llegó otra mujer que me dejó porque ganaba más que yo.

La de los ojitos lindos, ella me dejó porque a mis 31 soy un tipo centrado, según ella “en cualquier momentos me vas a dejar, no sé que hace un hombre como tú con una mujer como yo” así, que para no perder ni una, me dejó.

Aquella mujer me dejó porque le fui infiel, pero se lo merecía, si pudiera me follaría hasta a su abuela.

Ella me dejó por mi adicción al trabajo, es que ella nunca estuvo lista para ser la segunda de mis prioridades.

Y cerraremos con ella, que me dejó cuando le dijeron en un café.

Epa, eres tú la chama que salé en el Blog de Historias..