miércoles, julio 04, 2018

siempre llega un día


Tuve un amor, un amor a primera vista y se los digo con todas las de la ley, supe que iba a amar a esa mujer como un bobo, cómo un lunático, como un loco, los primeros 5 segundos cuando la conocí y miren que estuve enamorado de ella más o menos unos 10 años y ella pensó que nunca la iba a dejar, ella pensó que lo nuestro era tan del otro mundo y ella pensó que no importaba todo lo que me hiciera porque al final del cuento íbamos a estar juntos ella y yo... y qué les puedo decir, ella pensó que nunca la iba a dejar y un día, me levanté con el apellido atravesado y todo se acabó. Después de tanto amor y de su seguridad de “él nunca me va a dejar” así estamos hoy ella en otro país casada con otro hombre y yo aquí sentado escribiendo este post.

Tuve otro amor, nos prometimos muchas cosas, nos prometimos una casa grande, con tres niños y un perro, nos prometimos un “vamos a ponerle ganas a la vida para estar años juntos”. Nos prometimos, nos prometimos y nos prometimos y ella nunca cumplía sus partes de las promesas, pero vamos, que yo la amaba mucho y ella segura de ese amor que yo le demostraba, de ese amor que le profetizaba.. y un día muy a mi pesar y muy al suyo, me desperté con ganas de una mujer que si cumpliera sus promesas, porque me di cuenta que en mi casa grande, con tres niños y un perro puede entrar cualquier mujer y que no necesariamente la necesitaba a ella y un día sin aviso, la dejé… me cansé.. y ahí sigue mi casa grande, sin tres niños pero con un perro.

Tuve aquel amor, qué me quería en su vida unas semanas pero no unos meses y cuando esas semanas se volvieron unos meses ella no le agradó la idea de que esos meses fueran algunos años y me dejó… quería pensarlo, quería ver si yo la amaba tanto como ella necesitaba porque, vamos.. si él me ama tanto, puedo regresar a su vida cuando me de la gana”. Me hubiera gustado decirle que en el pasado me había dado el lujo de sacar de mi vida a mujeres asombrosas así tal cual como era ella, pero como me dejó sin aviso no pude darle cara y reprocharle cualquier pendejada en la cara como todo un buen hombre despechado. Lo hermoso del cuento fue cuando intentó regresar.. y no, no le dije aquello que debí decirle en su momento, sencillamente le sigo demostrando que mi vida piensa que mujeres como ella no merecen segundas oportunidades, hasta mi pene pasa de ella... y que un hombre que antes te amaba con locura y te podía hacer el amor seis veces en una noche no te quiera ni mamar una teta, eso le debe doler a las mujeres en algún lado.

Soy un hombre que ama con locura, pienso que no soy ni tan mal partido. Me baño regularmente y también intento no hablar con la boca llena. En mis relaciones soy bastante caballero y complaciente, tengo esta manía de dar mucho, en darlo todo hasta el punto de “malcriar” a mi pareja por la webona ilusión de “así me gustaría que me trataran a mi” el problema radica en que llega un día y ya no me provoca seguir "dando", complaciendo, cediendo, amando y quiero ser yo el intransigente, el complacido, el amado. Y cuando veo, que la vida y el amor generalmente no te dan lo mismo al mismo tiempo, me desencantó y se me acaba el amor, de un día para otro y miren que la Historia.. nos ha enseñado que construir Roma tardó tanto tiempo pero la quemaron en un sólo día. A veces hay días en los que el que se quiere equivocar soy yo, el que necesita amor soy yo.. el que necesita perdón soy yo y el que se quiere vengar soy yo.

Llega un día que ya no quiero ¿y es que a mi me van a amar para cuándo?, es que sencillamente ya no quiero dejar ser las cosas, que toda mierda me comienza a molestar y que quiero pasar factura por todo el daño que me han hecho, por todo el tiempo invertido, por todas las veces que me callé la boca y no dije esa grosería que se merecía esa actitud de mierda de una mujer soberbia.. ¿y para cuándo no voy a ser yo quien ceda? ¿y para cuándo voy a ser yo el que no haga algo porque no le da la gana y ya?... ¿no se siente sabroso cuándo al que joden vivo no eres tú?

siempre llega un día…siempre…