martes, enero 06, 2009

Un Momento en la Eternidad

Recuerdo como alguna persona una vez me dijo que la definición de la palabra “Eternidad” era esa sensación que se tiene cuando tienes sexo con alguna mujer la cual no quieres en lo absoluto, la “Eternidad” comienza en el momento en que terminas el acto sexual hasta que ella se marcha por si sola o la tienes que llevar a su casa. Cuando escuché aquella cosa no pude negar que tenía un poco de lógica mundana, pero no fue hasta hoy cuando a las 3:20 am vivo ese momento de “Eternidad” teniendo a una chica completamente desnuda en mi cama pero sinceramente estoy completamente hastiado de hacerle el amor y lo único que espero es el amanecer para que se largue y me deje completamente solo para así poder dormir.

No es que ella no me deje dormir, pero comencé a sentir una incomodidad muy extraña al verla a mi lado. Pensé en cosas como “si la quisiera, ¿aunque fuera un poco esto pasaría?” o “¿ella sabrá que no quiero nada con ella más allá de esto que tenemos?” y como esos pensamientos pasaron miles y miles de cosa por mi mente la cuales me causaron un insomnio severo.

En uno de los lapsos de pensamientos que tuve como desde las 2:00 am hasta el momento que decidir venir a escribir, me pasó aquel pensamiento morboso de contar con cuantas mujeres estuve este año. Aunque estamos a 20 de diciembre, no creo que la cuenta suba. A comienzo de año me arrepentí de mi año anterior, ya que tuve un comportamiento un poco libertino y no quería repetirlo.

Una de las promesas para nuevo año fue hacer algunos cambios en mi vida y para mi sorpresa todos los cambios fueron hechos de una manera exitosa, menos lo del asunto de el “libertinaje”; comencé el año queriendo pasar estos 12 meses con una sola mujer, pero para mi sorpresa ví como todo intento de buen comportamiento de mi parte solo repercutía cargas negativas y fracasos en asunto de mujeres.

Lo intenté seriamente con 2 o 3 chicas las cuales prometí que no manipularía, ni jugaría con ellas y para mi absoluta ira y rencor ninguna de ellas ni un beso me dio, me trataron como su propiedad, me celaron, me alejaron a cuanta mujer me rodeo en ese momento pero a la final ninguna de ellas ni un beso me diera, aunque hoy día las 3 me buscan con un sentimiento de arrepentimiento para mí los actos son como el agua que fluye, una vez que corra no hay vuelta atrás y ellas en mí ya no despiertan ninguna clase de interés.

Parece como algo absurdo todo aquello que sucedió y como buen hombre vengativo entre cada decepción culpé por mi fracaso a mi entupida promesa y casi inmediatamente caía en la cama de cualquier mujer muy atractiva pero sin mucho interés para una relación futura.

En ese “Intento” de promesa de nuevo año dure 10 meses hasta que me hastíe y al mes 11 fue como si el disco duro de las promesas de año nuevo no cumplidas se formatease y automáticamente volví a mi conducta tan aborrecida por mi el año anterior y así hoy 20 de diciembre a las 3:31am conté 5 mujeres menos que el año pasado en el cual no tuve remordimiento alguno…. ¿Solo 5 mujeres menos? Que asquerosidad de promesa, pero lo positivo es que algo quedo para este escritor nocturno: “no importa que tanto se busque algo, realmente es cierto que eso llega cuando no se espera”.

El año que viene no abra promesas entupidas… 


1 comentarios:

LaMorocha dijo...

Es mejor estar una noche a solas que una noche con una persona, que sabes de antemano, te va a ser sentir más solo...