Un día mi amigo Alfie me dijo que la única manera de buscarle imperfecciones a las cosas bellas era mirarlas muy de cerca.. y de esa manera ella pasó dos días metida en mi casa, es casada pero pasó 36 horas conmigo, en mi apartamento, de la cama a la cocina a la cama de nuevo.. prender el tv, poner películas.. a la cama, abrazarnos, sexo, hacernos el amor hipócritamente hablando y así se fueron 36 horas de nuestras vidas en mis cuatro paredes un día y medio o dos días y una noche o como tú lo quieras llamar, con su desnudez en mi cama, en mi cocina y en mi sala... fueron una noche y dos días..
Le enseñé lo mejor de la cocina turca y mediterránea, la abracé mientras dormía y besé su boca como si fuese la mía, como si en algún titulo de propiedad la tuviera y es que en esa noche y en esos dos días la llené de atenciones como lo que es, como una princesa, le hice el amor once veces en 36 horas, y algunas películas y algunas series nos acompañaron y es curioso, nunca había conocido una mujer que le gustará pawn stars hasta que llegó ella.. con su pierna sobre mi pierna y con sus manos jugando con los pelos de mi pecho... así se fue un día y medio de nuestras vidas.
Dejé mi corbata tirada en algún rincón, al lado mi camisa blanca.. y ella dejó su bolso, su cartera, su matrimonio y todas sus otras cosas falsas en mi sala.. que extraña se siente la cama sin ese olor mezquino que tiene su perfume… cabellos rubios por toda la cama, manchas de maquillaje en el lavamanos y muchos platos sucios en la cocina, platos de comida para dos..botellas de vino sin destapar, lugares de la casa sin profanar..
No acostumbro a encariñarme con los juguetes, pero es difícil cuando el juguete es ella. Intenté llevarla a cenar a un restaurante bonito agarrada de la mano pero no le gustó, algo molesta pensé que se iría a su casa, sin dar detalles, de malcriadez , así sin mas..sin nada, pero regresó a dormir en mi cama, y le hice el amor como si yo fuese suyo, aunque ella eso de la propiedad seguramente no le importaba y tristemente sentí como quien se sienta en un banco en el parque todos los días y creé que el banco el suyo pero en su ausencia se sienta cualquiera..
Le hice el amor con ternura y cuando fue preciso también se lo hice como se le hace a una puta… que mujer tan hermosa sumergida en semejante matrimonio sin sentido y ustedes saben que no soy de dormir mucho, y pasé la noche cuidándola, por si llegaba el bogeyman y le jodía los sueños y primera vez que ella se queda una noche completa, me hizo pensar que el amor es raro.. es muy extraño.. eso es el amor... del amor probablemente que siente ella por su esposo, y del amor que seguramente no voy a sentir de ella jamás.
No le pedí nada más allá de sexo oral, pero si le di yo todo lo que le pude dar.. aunque 36 horas son pocas para conocer un alma, eso fue lo que intenté, darle un libro abierto para que ella lo leyera pero hábilmente me dio a leer un libro cerrado. Y mis teléfonos apagados, y zutana y mengana y fulana me llamaron estos dos días pero yo estaba demasiado ocupado con ella entre mis brazos… su piel blanca como la luna y sus lunares como estrellas y tal vez ella no sea la más bonita entre mis mujeres, pero yo les aseguro que si es la más bella.
Quien sale con una mujer casada es el tonto que siembra en huerto ajeno.. le di de todo mi reino para que hiciera ella de él una hoguera…. Quemó todo antes de irse y mientras estoy acá contándoles como se fue con una parte de mi..
su marido debe estar cuidando sus sueños hoy..
2 comentarios:
Si te contara
mi sufrimiento,
si tú supieras
la pena tan grande
que llevo yo adentro
la triste historia
que noche tras noche
de dolor y pena
llena mi alma,
surgió en mi memoria
como una condena.
Si tu supieras,
te importaría
si te dijera
que en mi ya no queda
ni luz ni alegría
que tu recuerdo
es el daño mas fuerte
que me hago yo mismo
por vivir soñando
con que tu regreses,
y arrepentida.
(Félix Reina)
Si tu supieras, mi sufrimiento,
Si te contara, la inmensa amargura
que llevo tan dentro
La triste historia que noche tras noche de dolor y pena llena mi alma,
Surge a mi memoria como una condena
Si lo supieras, te importaría,
Si te dijera que en mí ya no queda ni luz ni alegría
Que tu recuerdo es el daño más fuerte
Que me hago yo mismo, por seguir soñando con que tú regreses, arrepentida.
Si lo supieras, te importaría
Si te dijera, que en mí ya no queda ni luz ni alegría
Que tu recuerdo, es el daño más fuerte que me hago yo mismo, por seguir soñando con que tú regreses,
arrepentida.
(Tito Rodríguez: Si Te Contara)
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